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¿Por qué deberías comprar una manta con peso?

Dormir es una de las cosas más importantes que hacemos para nuestra salud y bienestar. Pero a veces es difícil conciliar el sueño o dormir toda la noche. Quizás sufras de estrés, ansiedad, dolor u otros problemas que te mantienen despierto. Afortunadamente, existe una solución sencilla y natural que puede ayudarte a dormir mejor: una manta con peso. En esta entrada del blog te explicamos qué es una manta lastrada, para qué sirve, quién puede usarla y a qué debes prestar atención si quieres comprar una.

¿Qué es una manta con peso?

Una manta lastrada es una manta que tiene un peso extra, normalmente entre 2 y 15 kilogramos. Este peso se distribuye sobre la manta mediante pequeños objetos, como gránulos, discos o perlas de plástico o vidrio. El exterior de la manta suele estar hecho de un tejido suave, como algodón, bambú o vellón. Una manta con peso proporciona una presión suave y uniforme sobre tu cuerpo, dándote la sensación de que te están abrazando.

¿Para qué sirve una manta con peso?

Una manta con peso sirve para varias cosas, como por ejemplo:

  • Mejorando la calidad de tu sueño. Una manta con peso puede ayudarle a conciliar el sueño más rápido, a dormir más y a despertarse con menos frecuencia. Esto se debe a que el peso de la manta calma tu sistema nervioso, reduce tu ritmo cardíaco y regula tu respiración. También hace que tu cuerpo produzca más melatonina, la hormona que regula el ritmo de sueño-vigilia.
  • Reducir el estrés y la ansiedad. Una manta pesada puede brindarle una sensación de seguridad y protección, haciendo que le molesten menos los pensamientos y emociones negativos. También estimula a su cuerpo a producir más serotonina y oxitocina, las hormonas que promueven su estado de ánimo y sus vínculos sociales.
  • Aliviar el dolor y la tensión. Una manta con peso puede relajar los músculos, mejorar la circulación sanguínea y apoyar las articulaciones. Esto puede reducir los dolores causados ​​por, por ejemplo, artritis, fibromialgia o menstruación.
  • Tratar ciertas condiciones. Una manta con peso también puede ser eficaz para personas con determinadas afecciones que afectan su sueño o su procesamiento de estímulos, como autismo, TDAH, trastorno de estrés postraumático o depresión.

¿Quién puede usar una manta con peso?

Cualquier persona que quiera dormir mejor o sentirse mejor puede utilizar una manta con peso. No existen restricciones de edad ni de salud para usar una manta con peso, siempre que se sienta cómodo con el peso y la presión. Hay algunas cosas que debes tener en cuenta si quieres utilizar una manta con peso:

  • Elija el peso adecuado para usted. Una pauta general es utilizar el 10% de tu peso corporal como peso ideal para tu manta. Pero esto puede variar según la persona, según sus preferencias y necesidades. Pruebe diferentes pesos para ver cuál funciona mejor para usted.
  • Elige el tamaño adecuado para ti. Una manta con peso debe adaptarse a la altura de su cuerpo y al tamaño de su cama. No debe ser ni demasiado largo ni demasiado ancho, ya que esto puede provocar que el peso caiga hacia los lados o hacia abajo. Tampoco debe ser demasiado corto ni demasiado estrecho, porque entonces no podrá ejercer suficiente presión sobre todo el cuerpo.
  • Elige la tela adecuada para ti. Una manta con peso debe resultar cómoda para su piel y coincidir con su preferencia de temperatura. Algunas telas son más cálidas y suaves, como el vellón o la franela. Otros tejidos son más frescos y transpirables, como el algodón o el bambú. Elija la tela que se adapte a su estación y clima para dormir.
  • Consulta a tu médico si tienes alguna duda. Una manta con peso es generalmente segura y saludable, pero si tiene una afección médica que afecta su respiración, presión arterial o movimiento, es aconsejable consultar a su médico antes de usar una manta con peso. Esto también se aplica a las mujeres embarazadas, a los bebés y a los niños pequeños.

¿Qué requisitos debe cumplir una manta lastrada?

Si tienes uno manta ponderada Si deseas comprar, hay una serie de cosas a las que debes prestar atención para asegurar una buena calidad y durabilidad, como por ejemplo:

  • El material del relleno. El relleno de una manta con peso debe distribuirse uniformemente por toda la manta para que el peso y la presión sean consistentes. El relleno tampoco debe poder moverse ni gotear. Los materiales más utilizados para el relleno son gránulos, discos o perlas de plástico o vidrio. Estos materiales son hipoalergénicos, inodoros y silenciosos. Evite materiales como arena, arroz o frijoles, ya que pueden enmohecerse, pudrirse o atraer plagas.
  • El material de la funda. La funda de una manta con peso debe ser resistente y cómoda. Debe poder resistir el desgaste y el lavado sin rasgarse ni deshilacharse. También debe ser suave y transpirable, para que se sienta cómodo en la piel y no pase demasiado calor ni demasiado frío. Los materiales más utilizados para la funda son el algodón, el bambú o el vellón. Algunas fundas también tienen cremallera o botones, lo que las hace fáciles de quitar y lavar.
  • El diseño de la manta. El diseño de una manta pesada debe ser práctico y estético. Debe adaptarse a tus gustos y estilos, pero también a tus hábitos y necesidades de sueño. Por ejemplo, algunas mantas tienen un estampado o color que te gusta. Otras mantas tienen funciones adicionales, como control de calor o enfriamiento, aromaterapia o función de música.

Conclusión

Una manta pesada es una manta que tiene peso extra, lo que proporciona una presión suave y uniforme sobre el cuerpo. Esto puede ayudarle a dormir mejor, reducir el estrés y la ansiedad, aliviar el dolor y la tensión y tratar ciertas afecciones. Cualquier persona que quiera dormir o sentirse mejor puede utilizar una manta con peso, siempre que elija el peso, el tamaño, la tela y el diseño adecuados para usted.

Esperamos que esta publicación de blog te haya ayudado a aprender más sobre las mantas con peso y a encontrar la mejor manta con peso para ti. ¡Dormir bien!

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